viernes, 28 de septiembre de 2012

LIQUIDAR BANCOS


"Si se liquidan entidades, se garantizarán los depósitos de los clientes, dice el subgobernador del Banco de España."
Eso es lo que hay que hacer, liquidar las entidades bancarias infectadas por el ladrillo y los gestores políticos nombrados a dedo para beneficio de los partidos políticos y sus secuaces, aquellos del "España va bien", que repetía un siniestro político en un tono de negligencia de juzgado de guardia. 
Los ciudadanos no tenemos porque pagar con subidas de impuestos y recortes en nuestros derechos los desmanes de una clase política incompetente y codiciosa, avariciosa en opinión de otros. Una clase política, la conservadora, imbuida de un afán depredador basado en la ganancia rápida y nada previsora para el futuro de sus gobernados. Enemiga de la ciencia, la investigación, la educación y la cultura. Rijosa y poco respetuosa con opiniones y lineas de pensamiento diferente a las suyas, como corresponde a personas educadas entre monjas y curas. Hipócritas y falaces, manipuladores y demagogos. Mentirosos. Lo malo es que fueron sustituidos por otro partido que presume de progresismo y, aunque ya era conocedor del gran problema económico que afectaría más pronto que tarde a todo el país, opto por la estrategia del avestruz. Estos dos partidos: PP y PSOE, no han sido los únicos. Los partidos minoritarios a nivel nacional o autonómico, así como los sindicatos tampoco hicieron mucho por impedir el cúmulo de despropósitos, ni protestaron mientras algunos de sus miembros ocupaban asientos en los consejos de administración que daban el visto bueno a los desmanes crediticios. ¿Por qué tenemos que pagar todos su irresponsabilidad? ¿Por qué no son investigados y juzgados en los casos que corresponda? 
Devolver los depósitos a los propietarios de una cuenta corriente o una cartilla de ahorro según garantiza la ley; después..., liquidar el banco o la caja de ahorros. Vender las propiedades inmobiliarias pagadas a precio de oro por su valor real de mercado, o crear una bolsa de alquiler social y que los inversores apechuguen con sus perdidas, nadie, salvo su codicia, les obligo a invertir. Esta sencilla operación no cuesta dinero a los ciudadanos, solo a los culpables de la crisis, pero no se adopta porque los políticos aparecerían como los verdaderos culpables y responsables de la misma y tienen un compromiso de "mafiosos" con los que han prestado su dinero allá en Alemania, Francia, etc. Por eso es importante seguir protestando y decirles a todos los políticos corruptos que ahora nos gobiernan que la situación no la hemos creado nosotros, sino ellos, y que el sistema político actual ya no resulta el adecuado para las necesidades participativas del pueblo en la gobernabilidad del estado. No somos menores de edad, ni nos gusta ser engañados, ninguneados, estafados, tratados como ciudadanos de tercera categoría o como si fuéramos tan ignorantes como la clase política empeñada en tomarnos por valedores de su inepcia, negligencia y corrupción.