viernes, 22 de marzo de 2013

PRIMAVERA

Típicas flores de Primavera

   ¿Dónde esta el poder? Obedeciendo ordenes del poder. ¿Dónde están los ciudadanos? Descansando. En España debe haber un par de millones de ciudadanos, contando a los humoristas. Es un cálculo que hago a ojo de buen cubero, reuniendo a todos los que han acudido, en un momento dado, a una manifestación; hay que tener en cuenta que la mayoría de esos dos millones repiten una y otra vez. Un ciudadano es una persona comprometida con todas las decisiones políticas que se toman en su entorno, siendo éste, el ámbito territorial afectado por las mencionadas actuaciones políticas, o lo que es lo mismo: España. ¿Qué ocurre con el resto de habitantes? Nada, son plebe. ¿Qué es la plebe? Podría responder que la respuesta se encuentra en la Roma del siglo I o II, pero no. La plebe del siglo XXI desconoce el circo romano y la lucha de gladiadores. Vive con miedo y dentro del miedo, un miedo aterrador surgido del desconocimiento y la ignorancia, de la incomprensión y la negación a reconocer que sin el compromiso individual y el esfuerzo por cambiar las cosas, nadie lo hará. 
   A el poder, el que da ordenes al poder, no le conviene ni le interesa que ese individuo difuminado en la plebe sea consciente de que su compromiso individual, imbricado en el de todos, es capaz de cambiar las cosas. No voy a poner un solo ejemplo de como puede hacerse eso, pues todos saben cuando se levantan por las mañanas y salen a comprar el pan que es lo que deben hacer. Si, todas esas cosas en las que ha pensado antes de dormir, o al menos una de ellas... ¡Goooooool!
   La primavera ha llegado y nadie sabe como ha sido.